Datos personales

miércoles, 17 de julio de 2013

EL GRAN CIRCO DE GASCOIGNE

Las Islas Británicas vieron nacer el fútbol cuando la Football Association decidió separarse del rugby. Este mismo país ha visto a algunos de los mejores jugadores de la historia como George Best o Stanley Matthews. Sin embargo, los rotativos ingleses, los periodistas británicos y los aficionados al fútbol en general no dudan en señalar a Paul Gascoigne cuando les preguntan por el mejor, el más talentoso. Y si de talento natural hablamos no hay dudas, Gazza fue un genio cuando sus problemas con el alcohol no le impedían hacer magia con el balón.

La carrera deportiva de Paul Gascoigne se desarrolló a la par que sus problemas de comportamiento. A los 13 años sus diabluras con el esférico le valieron para firmar por el Newcastle pero durante su adolescencia tuvo que hacer frente a la muerte de su padre. La inestabilidad familiar y los problemas en el hogar le llevaron a tener encuentros con la ley y a desarrollar una actitud compulsiva. Por aquel entonces estos problemas no intercedieron en su carrera futbolística. El pequeño centrocampista inglés seguía creciendo y su talento no parecía tener límite. Pero sus bromas tampoco como demostró cuando invitó a su compañero de color, Cunningham, a una sesión de rayos UVA.

Vinnie Jones y Gazza en un Wimbledon-Newcastle
Sus problemas de comportamiento facilitaron su salida de las ¨Urracas¨ que habían aceptado la oferta de dos millones de libras del Tottenham Hotspurs. Las grandes actuaciones iban acompañadas de salidas de tono como en la final de la Copa. Gascoigne hizo una dura entrada contra el jugador del Nottingham, Gary Charles, sin embargo el que salió peor parado fue ¨Gazza¨ que se fracturó los ligamentos cruzados y estuvo casi un año de baja cuando la Lazio ya le había fichado. El club italiano desembolsó ocho millones a cambio del gran talento británico. La mala suerte se cebó con él tras recuperarse de la lesión ya que volvió a recaer al hacer una falta a Nesta durante un entrenamiento. El cada vez más incomprendido jugador no empezaba con buen pie en su aventura italiana.

¨Gascoigne es un jugador fantástico…cuando no está borracho¨ Brian Laudrup.

 Su balance en el club romano no fue positivo: 41 partidos en tres años, seis goles y tan solo un subcampeonato de liga. A pesar de todo la afición le idolatraba, no solo por el gol que le hizo a la Roma sino por sus excentricidades. En otro derbi la afición de la Roma le lanzó chocolatinas, Paul Gascoigne respondió comiéndose una y demostrando que su problema de peso no le importaba. Los problemas más graves los tuvo con la prensa, tras la no convocatoria para un partido contra la Juventus un periodista le preguntó su opinión, Gascoigne respondió al micrófono con un eructo. La broma del inglés dio la vuelta al mundo y el presidente, Cragnotti, afirmó que no volvería a fichar jugadores ingleses. La paciencia se terminó de agotar y el talento del inglés volvió a cambiar de aires, su próximo destino fue Escocia donde no dejó indiferente a nadie.


El recuerdo que tienen de Paul Gascoigne de su etapa en el Glasgow Rangers se retoma a una celebración muy polémica ante el Celtic. El mediocentro inglés celebró un gol simulando que tocaba la flauta, gesto que simboliza las marchas protestantes y que la afición católica del Celtic consideró ofensiva. Las represalias que tuvo ¨Gazza¨ no le cortaron las alas ya que tres años después repitió el gesto durante el calentamiento previo al encuentro estelar de Escocia. Además de estas polémicas Gascoigne se despidió de Glasgow con dos títulos de liga bajo el brazo.

La celebración que enfadó a los católicos del Celtic
Tras esta última aventura Gascoigne no volvió a tener suerte a nivel de clubes. En el Everton las lesiones y su alcoholismo le impidieron rendir a un nivel decente, en el Burnley duró cuatro meses, su periplo americano tampoco cuajó y el bueno de ¨Gazza¨ acabó militando en la segunda división de China. En el Middlesbrough tampoco aguantaron sus pesadas bromas, tras un entrenamiento y vistiendo solo los calcetines, el díscolo Gascoigne se dirigió a la cafetería a reclamar su desayuno.

Con la selección inglesa Gascoigne llegó hasta las semifinales del Mundial de 1990 donde Alemania eliminó a los Pross en la tanda de penaltis. Idéntico resultado cosecharon en la Eurocopa del 96, competición en la que Gascoigne destrozó un avión durante uno de los viajes. Hoddle confió en él para el Mundial de Francia que se disputó en 1998 pero por aquel entonces Paul estaba entregado a otras causas.

¨Una vez le dije a Gazza que su coeficiente intelectual era más bajo que su dorsal . Él me preguntó ´¿qué es un coeficiente intelectual?´¨. Best

 Cuando su cuerpo ya no le permitía sostenerse sobre los terrenos de juego Gascoigne prometió curar sus problemas con el alcohol y convertirse en entrenador. Hoy en día el inglés sigue enfrentado a una sociedad que parece no comprenderle a pesar de la ayuda que le ofrecen una y otra vez. Las clínicas de desintoxicación no han podido corregir el comportamiento de un hombre que se resistía a abandonar el fútbol, lo único que le ha mantenido con vida. La prensa inglesa se hacía eco de sus últimas locuras con titulares como ¨El destino roto de Gazza¨ o ¨Un ídolo en agonía¨. Gascoigne se preguntaba ¨¿ya no juego? ¿ya no existo?¨ pero aún así se resiste a aceptar ayuda. Actualmente el agujero negro en el que se encuentra sumido parece demasiado hondo pero en el recuerdo siempre estarán sus diabluras sobre el césped, mientras jugaba al fútbol. Ese era su circo y él su mejor payaso.


Pablo Hoz Villanueva
@pablohozv

0 comentarios:

Publicar un comentario